La historia entre Georgina y Stephen continúa: ambos están muy enamorados, viven en Oxford (ya a las afueras de la universidad) tienen dos hijos pequeños y ella vuelve a estar embarazada.
Pero la felicidad de la pareja es interrumpida cuando Georgina está tomada como rehén en un atraco en un banco en Londres durante una misión suya; así que Stephen se ve obligado a dejar a sus hijos a su mejor amigo, Thomas Baker e irse corriendo a la capital inglesa.
Thomas, es otro de los reputados profesores en el campus. Es un guapo soltero y nunca, nunca ha tratado con niños, por lo que se le hace difícil cuidar de los hijos de su amigo.
Afortunadamente, Nancy Newman, una vecina de Thomas, oye los gritos desesperados de él mientras trata de atender los niños y ella se presenta en su piso para ayudarlo...
Aunque Nancy nunca ha tenido hijos, sabe muy bien como tratar con ellos y hacerles todo tipo de carantoñas para que caigan rendidos a sus pies.
Lo que comienza siendo una simple ayuda acaba con un romance entre ambos...
Nunca es tarde
Isabel Keats
Editorial: Harlequín Ibérica
ISBN: 978-84-687-4720-0
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Cuando empecé a leer este relato, no sabía que era como una segunda parte de Nada más verte. Me hizo mucha ilusión la sorpresa y más volverme a encontrar con los personajes que me gustaron muchísimo: Georgina y Stephen.
Me angustió mucho el hecho de que Georgina estuviera dentro del banco como rehén, tanto o más que cuando dispararon a Stephen en el libro anterior. ¡Un mal rato si que pasé!
No obstante, esta nueva entrega, me ha gustado mucho y también me he divertido mucho con Thomas y Nancy; unos personajes muy entrañables y que hacen ver que nunca es tarde para enamorarse y tener segundas oportunidades en el mundo del amor.
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