Carolina Sanz siempre ha sido una chica con las ideas claras y segura de sí misma, hasta que Héctor Muñoz llega a su vida. Los hombres como él jamás habían sido su tipo, sin embargo, su insolencia y su desparpajo terminan por conquistarla. Y cuando están a punto de dar un paso decisivo en la relación, un secreto del empresario la pone en peligro.
Ambos son conscientes del dolor que supondría estar separados, pero no saben si juntos podrán superar la situación. Y sólo cuentan con veinticuatro horas para tomar una decisión.
¿Y tú, sacrificarías tu felicidad por un error del pasado?
Confiésamelo sin palabras
Patricia Geller
Editorial: Zafiro
ISBN: 978-84-081-8124-8
Como os comentaba en la entrada de ayer, Susúrramelo al oído me gustó tanto, pero era tan corto que cogí Confiésamelo sin palabras con muchísimas ganas pensando que me iba a entusiasmar como el anterior.
Sinceramente, me llevé un chasco enorme... por infinita vez en literatura erótica, la protagonista solo cree en príncipes azules, no tiene carácter, es débil, se deja manejar con facilidad... en fin, un montón de cosas negativas de las que se lleva actualmente. Por otro lado, Héctor es un hombre prepotente, dominador, imponente, infiel, que se tira a todas las mujeres del mundo, etc.
Como era de suponer, Carolina se encuentra en la situación que le ha puesto los cuernos su pareja (aunque sea al comienzo de la relación), éste le miente hasta el momento antes de casarse y ella, ahora tiene que elegir si quiere seguir con él o no.
Es muy difícil perdonar y olvidar una infidelidad porque por mucho que se haga, en el fondo de la mente siempre están las mismas preguntas: ¿estará ahora con otr@? ¿me ha sido infiel de nuevo?...
Desde mi punto de vista, se pierde cierta confianza que es la base de toda relación. Si yo estuviera en la piel de la protagonista, lo tendría muy fácil: bye, bye, baby.
Bueno, lo que quiero decir es que no me ha gustado mucho este relato por los protagonistas y por como se desarrollan los hechos. No obstante, si lo queréis leer es cortito y se puede hacer justo antes de ir a dormir.
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