Palacio de Villardompardo (Jaén, España)

El palacio de Villardompardo, situado en la plaza de Santa Luisa de Marillac de la capital, es uno de los edificios más singulares no solo de Jaén, sino de toda Andalucía.

Como las otras muchas construcciones andaluzas, su historia es rocambolesca. Los árabes construyeron aquí unos baños árabes, los más importantes de la ciudad.

Tras la conquista cristiana, con ese desprecio por el pasado que durante mucho tiempo fue característica del pueblo español, un noble, Fernando de Torres y Portugal, conde de Villardompardo y virrey del Perú, tuvo el capricho en el siglo XVI de construirse precisamente aquí su residencia, edificándola sobre los citados baños, un magnífico palacio de enormes dimensiones, con preciosos patios y lujosas y bien guarnecidas estancias. Luego, durante el siglo XVII y la mitad del siglo XVIII, el palacio fue sede de un banco. Más tarde fue hospicio de mujeres, formando parte del patrimonio de la Diputación Provincial, institución que construyó una capilla para el hospicio. En los años veinte del siglo pasado, Enrique Romero de Torres descubrió los baños agarenos que, por suerte, el señor marqués había mantenido en el subuselo de la residencia, dañándolos solo levemente al plantar los cimientos de la nueva edificación. A partir de entonces de Monumento Nacional en 1931. Los baños lo merecen, pues son los más grandes, más artísticos, arquitectónicamente hablando y, tras su restauración, los mejor conservados de España.

Actualmente, el edificio muestra un inmejorable estado de conservación. Además de los baños, de visita inexcusable, alberga dos museos, el de Artes y Constumbres Populares y el internacional de Arte Naïf, inaugurados ambos en 1990. El primero de ellos reúne una amplísima colección de objetos de la vida cotidiana y laboral tradicionales de los jiennenses, con elementos únicos y, muchos de ellos, curiosísimos, lo que lo convierten en uno de los más importantes de España en su género. El de Arte Naïf es, igualmente el más importante de España. Formado a partir del legado del pintor Manuel Mozas está formado por una ingente cantidad de obras, principalmente pictóricas, pero también esculturas, de los más brillantes artistas de este género.