Cada vez que voy a Salamanca conozco pueblos y restaurantes nuevos para mí. En un rinconcito de Ivanrey encontramos un lugar espléndido para comer que tiene mucho éxito entre los aldeanos de por allí.
La especialidad de la casa es el pollo a la brasa con ajito ¡Buenísimo! Comimos varios platos porque se puede repetir hasta que uno se harte sin tener que pagar de más. ¡Nunca he comido un pollo tan bueno como este!
También nos pusieron ensalada mixta que estaba rica, pero no triunfó tanto como el plato principal.
Y para finalizar, todos comimos flan casero también exquisito.
Salimos del restaurante muy satisfechos con la comida, el precio (bastante económico para todo lo que nos zampamos) y con ganas de volver a repetir. ¡Estoy deseando que llegue ese día porque solo escribiendo esto se me está haciendo la boca agua.
Merece la pena ir Ivanrey aunque solo sea por este sitio tan bueno. También es bonito pasear por sus calles y ver lo verde que está todo.
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