Hace unos meses le regalé a mi pareja unas entradas para ver Viejóvenes, una obra llena de sketches con Ernesto Sevilla y Joaquin Reyes.
He de confesar, que cuando las compré no sabía donde me estaba metiendo. Simplemente lo hice porque a mi marido le gusta y estuve barajando varias opciones antes de decidirme por este espectáculo.
Acabé tan borracha de mirar y mirar por google que al final mezclé un poco de todo y me hice una idea equivocada de lo que iba a ver esa noche. Vamos, que cuando la gente me preguntaba qué iba a ver, yo decía tan convencida (porque realmente lo pensaba así) "voy a ver un monólogo de David Guapo". Y ni era monólogo ni salía David Guapo... en fin... ¡menuda idea tan errónea me hice yo sola! Cierto, es que cuando me confundo, enseguida rectifico y lo digo. Así que me tocó rectificar el error a familia y amigos.
Una vez, que llegué a la puerta del evento fue cuando me enteré de lo que iba a ver esa noche:
Los muchachos nos presentan un nuevo espectáculo con motivo de sus doce años de trayectoria artística, año arriba, año abajo.
Para esta ocasión quieren presentarse como un dúo cómico (nunca antes lo habían hecho de forma profesional), hacer sketches en directo y dejarse ya de tanto monólogo.
Y claro, le han puesto un título: Viejóvenes ¿Cómo lo veis? ¿Estáis preparados para esta movida tan tocha? No respondáis ahora, habladlo en casa y meditadlo antes de ir al teatro.
Avisamos: Venid descomidos que el espectáculo dura 80 minutos …
Joaquín Reyes y Ernesto Sevilla son el dúo humorístico, de la nueva generación de cómicos, que ha logrado destacar dentro del humor absurdo y surrealista. Sus seguidores se cuentan por millones… bueno si no por millones, si por miles.
Entre muchas cosas son conocidos gracias a programas como: Muchachada Nui La hora Chanante, y Museo Coconut (dirigidos y creados por ellos mismos) además de las intervenciones humorísticas en las dos últimas Galas de los premios Goya.
Yo no sé si era viernes a las 23:30 (pido que, por favor, se ponga ) y yo estaba cansada u otra cosa... pero no me hizo mucha gracia y tanto fue así que me quedé dormida enseguida. Así, que poco puedo opinar de esto, porque me dormí y vi muy poco.
Desde mi punto de vista, creo que es para un público específico que no a todo el mundo gusta, como fue mi caso.
Los pocos sketches que me tragué antes de carne en los brazos de Morfeo eran los típicos pedo, culo, caca y pis; en mi opinión eran gracias de niños pequeños que no me entusiasmó aunque veía a muchos partiéndose de risa.
Sin embargo, a mi pareja le encantó y no se perdió ni un solo minuto del espectáculo.
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