Ayer os hablé de la semana creativa del cuarenta aniversario de Pentel donde os contaba que gracias a The Flower Journal me enteré de este evento. Sin duda, lo primero que salieron fueron las entradas para los talleres suyos de Lettering y de Acuarela que rápidamente adquirí para no quedarme sin ellas.
Esa semana estuve un poco atacada de los nervios porque coincidía las fechas con la feria de Creativa Madrid y casi que me tenía que dividir en dos para estar en ambos eventos a la vez, pero al final me organicé bien para estar en todo lo que quería. Acabé muy agotada pero mereció la pena.
De entre todo lo que podía hacer primero fui al taller de Lettering... y sí, estaba repitiendo curso porque este ya lo hice hace un año, pero me encantó y así pude preguntar mis dudas que me habían surgido a lo largo del 2018.
Fue estupendo porque aunque tuve que repetir los ejercicios conocí rotuladores y bolígrafos nuevos con los que podía dibujar letras y no usar siempre los Tombow que son los más conocidos en este mundo. Es cierto, que todos los materiales son un poco caros pero poco a poco se puede ir adquiriendo como he ido haciendo yo.
Además, lo pasamos fenomenal todas ya que no simplemente se impartió la clase sino también nos echábamos unas risas por lo que fue todo mucho más ameno.
Al día siguiente a primera hora era el taller de acuarelas que también repetí puesto que lo había hecho al principios de verano, pero tampoco me importó puesto que estoy muy verde con ellas aunque se ve que he mejorado un poco porque ya me van saliendo más flores aunque mi asignatura pendiente siguen siendo las rosas que son muy complicadas y me salen manchurrones horribles.
Como pasó el día anterior, también probé acuarelas nuevas que me gustaron un montón. Hasta ahora solo había usado las cápsulas y las líquidas, pero los tubitos que probé eran muy espesos y fáciles de manejar. Hasta que no gaste mis materiales o llegue a dominar bien las acuarelas no compro más porque es algo muy frustante para mí porque no me sale todo lo que quiero (tendré que volver a repetir, cosa que no me importa en absoluto, jeje) y muchas veces acabo abandonando por una temporada hasta que me vuelven las energías para retomarlo.
Por supuesto, también lo pasé bomba porque todas las personas que estábamos allí nos encontrábamos en un ambiente divertido y relajado. Sin duda, todas mis preocupaciones del principio desaparecieron en esta clase.
Esa semana estuve un poco atacada de los nervios porque coincidía las fechas con la feria de Creativa Madrid y casi que me tenía que dividir en dos para estar en ambos eventos a la vez, pero al final me organicé bien para estar en todo lo que quería. Acabé muy agotada pero mereció la pena.
De entre todo lo que podía hacer primero fui al taller de Lettering... y sí, estaba repitiendo curso porque este ya lo hice hace un año, pero me encantó y así pude preguntar mis dudas que me habían surgido a lo largo del 2018.
Fue estupendo porque aunque tuve que repetir los ejercicios conocí rotuladores y bolígrafos nuevos con los que podía dibujar letras y no usar siempre los Tombow que son los más conocidos en este mundo. Es cierto, que todos los materiales son un poco caros pero poco a poco se puede ir adquiriendo como he ido haciendo yo.
Además, lo pasamos fenomenal todas ya que no simplemente se impartió la clase sino también nos echábamos unas risas por lo que fue todo mucho más ameno.
Al día siguiente a primera hora era el taller de acuarelas que también repetí puesto que lo había hecho al principios de verano, pero tampoco me importó puesto que estoy muy verde con ellas aunque se ve que he mejorado un poco porque ya me van saliendo más flores aunque mi asignatura pendiente siguen siendo las rosas que son muy complicadas y me salen manchurrones horribles.
Como pasó el día anterior, también probé acuarelas nuevas que me gustaron un montón. Hasta ahora solo había usado las cápsulas y las líquidas, pero los tubitos que probé eran muy espesos y fáciles de manejar. Hasta que no gaste mis materiales o llegue a dominar bien las acuarelas no compro más porque es algo muy frustante para mí porque no me sale todo lo que quiero (tendré que volver a repetir, cosa que no me importa en absoluto, jeje) y muchas veces acabo abandonando por una temporada hasta que me vuelven las energías para retomarlo.
Por supuesto, también lo pasé bomba porque todas las personas que estábamos allí nos encontrábamos en un ambiente divertido y relajado. Sin duda, todas mis preocupaciones del principio desaparecieron en esta clase.
No hay comentarios:
Publicar un comentario