domingo, 15 de febrero de 2015

Pontevedra (España)


Estando en la provincia gallega de Pontevedra, no podíamos olvidarnos de hacer una pequeña parada en la capital.


Lo primero que tengo que decir de este sitio es una advertencia ¡Cuidado con las calles cuando uno va con el coche! La mayoría de las calles son sólo para los residentes de la zona y pueden poner multa. Es mejor aparcar fuera del casco histórico e ir andando al centro.

Una cosa que me llamó muchísimo la atención, es la cantidad de plazas que hay dentro del casco antiguo (llenas de restaurantes y bares de tapas) incluso algunas están muy pegadas a otras. En esta entrada no voy a mencionar todas sino algunas que me gustaron y algunas curiosidades que tienen.
  • La Plaza de la Leña es el lugar más emblemático de Pontevedra. Situada en pleno casco antiguo, en el pasado era el lugar en que se vendía leña, de ahí su nombre. En la actualidad alberga los edificios centrales del Museo Provincial de Pontevedra, está rodeada de soportales y en su centro se ubica un cruceiro del siglo XV, que con toda probabilidad se trasladó a la Plaza desde el Puente del Burgo. El principal atractivo de la Plaza de la Leña es su ambiente, gracias a los numerosos restaurantes y bares de tapas que hay en ella y en las calles aledañas.
  • En La plaza Méndez Núñez destaca la Casa de los Montenegro donde vivió en el siglo XV el almirante Casto Méndez Núñez, y donde se celebraban animadas tertulias de pensadores y escritores como Valle Inclán, del cual hay hoy una escultura de bronce presidiendo la plaza.
  • La Plaza de la Verdura es una de las más famosas del casco antiguo de la ciudad gallega de Pontevedra. Se encuentra entre la plaza de la Leña y la plaza anterior. En primavera y verano es la mejor época para visitarla por sus adornos de flores en todos sus balcones y sus numerosas terrazas.
  • La plaza de la Herrería, constituye un amplio espacio abierto que incluye la plaza de la Estrella, y los jardines de Casto San Pedro. Aquí se encuentra la Fuente de la Herrería que data del siglo XVI y con el paso del tiempo su ubicación fue cambiando de lugar, actualmente se localiza en los Jardines de San Pedro junto a la iglesia de San Francisco.
  • La Plaza de la Peregrina es una de las principales de la ciudad gallega, tanto por su céntrica situación como por albergar la iglesia de la Peregrina, el templo principal de la ciudad ya que esa virgen es su patrona. Conecta la zona nueva con el casco antiguo de la ciudad y es uno de los puntos más frecuentados por los pontevedreses y considerado por ellos como el corazón de la ciudad, lugar de paso, ocio y de celebraciones con los "maios". Es un espacio bastante amplio ya que enlaza con la plaza Orense, la de la Ferrería y los jardines de Casto San Pedro. Sus tradicionales terrazas, especialmente concurridas durante el verano, permiten disfrutar de los variados edificios que conforman este irregular espacio, casas de carácter popular, otras de corte modernista que le dan un especial perfil y, en lo alto, el convento de San Francisco.
  • La Plaza del Teucro no es de las más grandes de la ciudad, pero cuenta con una enorme historia. Situada en la zona monumental del la villa, esta plaza recibe su nombre de, según cuenta la leyenda, un arquero griego que, después de la guerra de Troya, viajó a occidente y fundó la ciudad de Pontevedra que posteriormente recibió un gran impulso de la nobleza, motivados por este mito, para dotarla de un mayor prestigio. La Plaza del Teucro está rodeada de construcciones de los siglos XVII y XVIII, como el pazo del Marqués de Aranda, el Pazo de San Román o de los Gago Montenegro, cada una con su correspondiente escudo heráldico tallado en piedra en sus respectivas fachadas. Esta plaza está rodeada de un enmarañado de calles donde abunda la piedra en suelos y edificios, y es la principal zona turística de la ciudad, tanto para salir de tapas, como para beber un buen vino a la sombra de un rosal, o escuchar un poco de música hasta la madrugada.
Además de las plazas, también hay cosas más interesantes que ver dentro del casco histórico como Las Ruinas de Santo Domingo que son uno de los elementos históricos y artísticos más destacados de la ciudad de Pontevedra. Se encuentran situadas en pleno centro de la localidad y son las ruinas de un templo construídos por la orden de los dominicos en el siglo XIII. El templo original era un edificio de estilo gótico pero no llegó a finalizarse, así que en el siglo XVII se intentó finalizar siguiendo esta vez el estilo neoclásico, pero una vez más no se pudo culminar la obra. En la actualidad las ruinas de Santo Domingo están formadas por la cabecera de la iglesia y un muro lateral. A pesar de que como su nombre indica son ruinas, el lugar se encuentra muy bien conservado y protegido y a mi personalmente me llamó muchísimo la atención porque es como contemplar el esqueleto de una maravillosa obra arquitectónica. Eso sí, el lugar está protegido con una valla y no se puede pasear cerca de la arquitectura, sólo se puede contemplar a cierta distancia.

Otro monumento que he mencionado mientras comentaba las plazas es el Convento de San Francisco. Trata de un edificio construido entre los siglos XIV y XV y es de estilo ojival tardío y se encuentra en bastante buen estado de conservación. El convento posee una sola nave de dimensiones bastante grandes y tiene un crucero con una cabeza. El buen estado de conservación en el que se encuentra se debe sobre todo a la restauración a la que fue sometido primero en 1.923 y después a partir de 1.995 cuando sufrió numerosos daños a causa de un incendio. Del exterior destaca sobre todo el inmenso rosetón que está situado en el centro de la fachada y la puerta principal que posee una altura espectacular. El conjunto de este convento es muy sobrio y solemne. En cuanto al interior lo más llamativo son los sepulcros medievales que posee. Para poder visitar el interior no suele haber problemas ya que está abierto continuamente porque se celebran misas a diario.

Por último cabe mencionar El Teatro Principal que es un edificio de 1.878, reconstruido en 1.980 tras un grave incendio que lo dejó casi irreconocible. Fue construido en el terreno de la antigua iglesia románica de San Bartolomé, derribada en el año 1.842, y donde se celebra la Bienal de Arte Moderno. El Teatro Principal tiene una rica y variada oferta cultural a lo largo de todo el año, compuesta principalmente por representaciones teatrales, conciertos, etc.

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