Como en muchas ciudades de España y del mundo entero, en Majadahonda hay un gran mercadillo todos los martes y sábados en un parking que hay entre las calles Erillas, Santa Catilina y Calle de la Luna.
Es enorme puesto que consta de 10.000 m2 con 180 puestos diferentes dedicados a la venta de una amplia oferta de productos como son los calzados, textiles, complementos, frutas y verduras, frutos secos y chucherías, ferretería, flores y plantas, decoración, artesanía,... ¡Tienen de todo!
Está considerado como uno de los mercadillos más dinámicos de la Comunidad de Madrid. Además, vienen un montón de gente de otras ciudades y dicen que únicamente a verlo aunque acaban comprando muchísimas cositas. !Uno puede encontrar famosos! Se dice que han ido Carmen Lomana, Paula Echevarría, Ana Botella y hasta a Esperanza Aguirre.
Todos los vendedores del mercadillo municipal poseen una licencia de venta expedida por el Ayuntamiento que se exhibe en un lugar visible en la que se indica el nombre y apellidos del vendedor titular así como los datos de la persona que lo puede sustituir, el número de puesto que ocupan, los días de venta y los productos que están autorizados a vender.
El consumidor siempre puede solicitar factura del producto ya sea porque la quiera o porque la necesite (cambios, devoluciones,...). Y, por supuesto, en todos los puestos se disponen de hojas de reclamaciones.
Durante todas las horas que está el mercadillo, está la policía municipal paseándose para garantizar la seguridad de los viandantes y también para proteger a los puestos legales de los top-manta o de los que falsifican las grandes marcas.
Está considerado como uno de los mercadillos más dinámicos de la Comunidad de Madrid. Además, vienen un montón de gente de otras ciudades y dicen que únicamente a verlo aunque acaban comprando muchísimas cositas. !Uno puede encontrar famosos! Se dice que han ido Carmen Lomana, Paula Echevarría, Ana Botella y hasta a Esperanza Aguirre.
Todos los vendedores del mercadillo municipal poseen una licencia de venta expedida por el Ayuntamiento que se exhibe en un lugar visible en la que se indica el nombre y apellidos del vendedor titular así como los datos de la persona que lo puede sustituir, el número de puesto que ocupan, los días de venta y los productos que están autorizados a vender.
El consumidor siempre puede solicitar factura del producto ya sea porque la quiera o porque la necesite (cambios, devoluciones,...). Y, por supuesto, en todos los puestos se disponen de hojas de reclamaciones.
Durante todas las horas que está el mercadillo, está la policía municipal paseándose para garantizar la seguridad de los viandantes y también para proteger a los puestos legales de los top-manta o de los que falsifican las grandes marcas.
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