Las guerreras Maxwell, Desde donde se domine la llanura

Cuando Megan y Shelma viven con su abuelo en Las guerreras Maxwell, Deseo concedido, conocen a la hija del laird de esas tierras; se llama Gillian que está muy enamorada de Niall, el hermano de Duncan.

Niall y Gillian se quieren mucho desde bien jóvenes e incluso llegan a prometerse, pero cuando llega una misiva del Rey de Escocia para luchar en Irlanda Gillian anula el compromiso por una rabieta. Desde entonces, se desean en secreto pero ninguno da su brazo a torcer por el orgullo propio ya que está dañado, ella porque él se va sin despedirse a la guerra y él por la anulación de la boda.

Durante años, Niall solamente se acuestan con fulanas y Gillian tiene muchos pretendientes pero ninguno es bueno para ella y siempre acaba retándolos con la espada y la daga, por lo que se la conoce como La Retadora.

Unos días antes del vigésimo sexto cumpleaños de Gillian, ella se entera que su padre hizo una promesa con otra familia: si ella no está desposada ni viudad y el hijo de esta familia tampoco, al día siguiente de este cumpleaños tienen una boda concertada. Gillian se angustia muchísimo porque no le gusta ningún aldeano excepto Niall y éste no está dispuesto a casarse con ella por lo ocurrido en el pasado.

Entre Shelma, Megan, Alana (la cuñada de Gillian), Kieran (el mejor amigo de los lairds Duncan, Lolach y Alex) y Gillian hacen un plan para engañar a Niall y decida casarse con ella antes de que amanezca el día después del cumpleaños. Niall, tras el engaño, decide celebrar la boda pero le va a hacer la vida imposible a Gillian para que ella se entere de todo lo que ha sufrido él por su culpa tras la anulación del primer compromiso.

Las guerreras Maxwell, Desde donde se domine la llanura
Megan Maxwell
Editorial: Planeta
ISBN: 978-84-080-0756-2
Puedes conseguirlo pinchando aquí y aquí.

Digo lo mismo que en el primer libro de Las Guerreras Maxwell, para leerlo hay que pensar que la historia está datada en los comienzos del siglo XIV, por lo que las mujeres no estaban a veces bien tratadas. Aquí sí he sentido la humillación Gillian desde el primer momento y cómo Niall se niega a reconocer todo el bien que hace a sus tierras y a todos los guerreros de su clan; sólo ve todas la cosas mal que hace ella y por ello la avergüenza delante de todo el mundo hasta que es tarde y ve que ella pierde toda su fuerza y su energía. Todo el dolor que siente ella, acabé sintiéndolo yo aunque al principio me dolió mucho también el dolor de Niall.

A pesar de esto, también me he reído muchísimo por las ocurrencias de Gillian, Megan y Shelma ¡son un peligro las tres juntas! y también he sentido el cariño que poco a poco iban cogiendo los guerreros de Niall hacia su señora.

Me ha gustado el libro y me ha mantenido intrigada hasta el final con la historia. La autora sabe cómo mantenerte dentro de la saga desde el principio a pesar de haber estado angustiada más de la mitad del libro.