domingo, 5 de abril de 2015

Un sueño real

Clara es una chica alegre y bondadosa con muchas ganas de vivir.

Un día se encuentra a una anciana que tiene problemas para subir unas escaleras y la ayuda. Después la señora mayor le da las gracias y Clara la pregunta por su nombre que es Olvido. Clara al escucharlo sale casi huyendo debido a una de las leyendas que hay en el pueblo que dice que Olvido es una bruja que hace desaparecer a las personas que se adentra en las montañas.

Cuando Clara llega a casa cuenta lo ocurrido a sus padres y su madre, Cruz, se escandaliza, pero su padre, Fernando, le dice que no hay que creer en las leyendas absurdas que hay en el pueblo puesto que el mismo dice que ha pasado por las montañas y que no le ha sucedido nada.

Pasan los meses y todos olvidan lo ocurrido con Olvido, llegando así la Nochevieja.

En la fiesta que se organiza Clara conoce a un chico que se llama Alberto que desde ese momento se convierte en su gran amor aunque tienen que separarse porque él es de otro pueblo. Antes de irse, Clara le enseña el pueblo y mientras le enseña el castillo, le cuenta una de sus leyendas favoritas que se supone que ocurrió allí: "Una princesa que se llamaba Leiza vivía con sus padres y su prima Seire (sus padres murieron). La princesa conoció a un muchacho que le gustaba mucho que se llamaba Caftul. Con el tiempo él le pidió matrimonio pero Seire era una envidiosa y para evitar la ceremonia le dio una pócima a Leiza haciéndola creer que era para que el amor durase pero la verdad es que la volvió una anciana y huyó. De esta forma Seire se casó con Caftul pero éste nunca la amó".
Después de la marcha de Alberto, Fernando le dice a Clara que vaya a conocer a Olvido que es una persona muy agradable y tiene algo que contarla. Aunque al principio ella tiene dudas, luego accede y cuando la conoce ve que su leyenda favorita fue real cuatro siglos atrás y que Olvido realmente es Leiza que está bajo un embrujo que solamente Clara puede deshechizarla casándose con Alberto cuando éste se lo pida, pero que tenga cuidado porque habrá alguien que quizá pueda estropear todo como le pasó a Leiza.

Desde ese momento Leiza y Clara son verdaderas amigas cogiéndose mucho cariño. Día tras día Clara va a ver a la anciana en las montañas para contarle todas la novedades que se producen en su vida.

Un fin de semana va Alberto a visitar a Clara para pedirle matrimonio; ella sin pensárselo dos veces le dijo que sí. Durante ese fin de semana Elena está muy celosa e intenta insinuarse a Alberto pero éste le dice que no y se lo cuenta a su prometida. Sabiendo Clara lo que sabe sobre la historia de Leiza, tiene muy claro que su prima es la que la va a estropear la boda por lo que está muy atenta a los sucesos.

La noche antes de la ceremonia, Clara se despierta a media noche por un sueño que ha tenido donde la indica que corre peligro. Y, efectivamente, al abrir los ojos se encuentra a su prima con unas tijeras en la mano con las que ha destrozado el vestido de novia y además queriendo matarla. Gracias a los gritos de Clara, se logra salvar y Elena acaba en un psiquiátrico.

Clara está apenada por lo ocurrido y más porque no tiene un vestido para casarse. Todos intentan animarla y la manda a dormir para que pueda descansar. Cuando por fin acaba rendida y se duerme tiene un sueño en el que Leiza le presenta a su familia y a su verdadero amor, además ya no se la ve anciana sino joven y le agradece a Clara todo lo que ha hecho por ella.

Por la mañana, Fernando va a despertar a su hija dándole una grata sorpresa: tiene el vestido de novia de Leiza y es con el que se puede casar ella. A pesar de que Leiza se ha ido, le deja tres cosas a Clara: el vestido de novia, un retrato de Leiza y Caftul (que se parecen a Clara y Alberto) y una muñeca.

Un sueño real
Megan Maxwell
Editorial: Planeta
ISBN: 978-84-0812-859-5
Puedes conseguirlo pinchando aquí.

Es una de las historias más bonitas que he leído nunca que realmente te hace pensar que no todos los rumores, mitos, leyendas de una zona son ciertas y que no siempre es oro aquello que reluce. Hay que ser espabilado y saber cuándo creerse algo y cuándo descartarlo.

En mi opinión, no hay que opinar de las personas que no se conoce y mucho menos cotillear como una cotorra sobre ellas porque se puede hacer mucho daño. Como se puede ver, el personaje de Olvido pasa un poco de las creencias de los demás, pero en la vida real no siempre es así.

Es otro relato corto y romántico de Megan Maxwell que se puede leer antes de ir a dormir sin estar enganchados toda la noche a la lectura ya que terminarás pronto con él. Además, seguro te hará soñar con cosas bonitas esa noche.

Sinceramente, creo que la novela tiene muchos valores escondidos. ¿Os atrevéis a descubrirlos? Os animo a todos a leerlo en un ereader (puesto que únicamente está para formato electrónico) y vayáis escribiendo en la zona de comentarios de esta entrada todo lo que encontréis.

No hay comentarios:

Publicar un comentario